¿Y si un día abrieras los ojos y,de repente,toda tu vida fuera perfecta?
28 octubre 2011
Esa sensación.
Estuve allí, y recordé esa sensación. El escalofrío que me recorría el cuerpo cuando el agua del mar se entrelazaba entre mis pies. Ese olor a mar, que siempre me recordaba aquellos veranos inolvidables que pasé cuando niña. Cerré los ojos y te noté allí, cuando no nos importaba el tiempo, el revolcarnos en la arena mojándonos como tontos, cuando saboreaba tu boca con demasiado sabor a sal. Ese sentimiento que me transmitías y me evadía, como dos cubatas en una noche de fiesta... Solo tú sabías hacerme enloquecer y enfadarme en menos de tres segundos. Pero llegó el momento, tuve que eligir, mi sueño o tú, sabías que no iba a renunciar algo por lo que daría la vida para conseguirlo, y no lo aceptaste, pero te demostré que estoy siendo capaz de conseguirlo. Andando aquella tarde por la orilla, me di cuenta de que el camino tiene muchas piedras, piedras que te hacen tropezar y te hacen daño, las huellas que dejas, alguien las borrará y solo quedará el recuerdo. Nadie más que tú sabrá el esfuerzo que te ha costado cada huella en el camino. No cambiaría la decisión que tomé, aunque te echo de menos, ya lo sabes. Mi corazón a veces, es como una playa triste, y tú una ola que viene y que se va...
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario